viernes, diciembre 30, 2005

Toma de conciencia

El embrujo del bosque

no lo forman los trinos de un pájaro.

Cautiva el vocinglerío.

***

En tu enorme geografía

se solazan mis tiempos.

Recorro valles y heredades,

de Ti me alimento.

***

Si se pudiera tocar el alma

¿Lo harían con miedo

a posar las yemas para palparla?

O engarfiarían los dedos

en el afán por asirla.

21 comentarios:

Lety Ricardez dijo...

Andreas mi grande y querido amigo:
Ay a veces al exponer el alma la he tenido en carne viva.

Pero dígame, donde anda usted ¿por qué Oaxaca no se enriqueció con su presencia? Yo estuve casi dos semanas sin Internet, ya sabe, la casa llena y yo viviendo dentro de mi veliz.
Pero lo he extrañado mucho, hoy estuve casi todo el día prendida a la computadora y ni siquiera en el messenger le vi.
Reciba mi abrazo cariñoso para los dos

princess olie dijo...

Querida Lety:

Yo tocaría el alma
con suavidad y ternura:
sin miedo,
sin angustia.

Lo haría así,
porque su edad la hace respetable:
lleva muchas vidas aprendiendo,
tiene muchas heridas en sus velos,
tiene antiguas cicatrices
no olvidadas...

Así tocaría, yo, el alma.
Y después, cerraría su puerta
con pudor y admiración.

Muchos abrazos:

Desde Chile, en la madrugada del último día de 2005 (4 hrs. 5 min.)

Olie

fgiucich dijo...

Ha regresado amiga con un hermoso poema que me llena de mucha ternura. Abrazos.

Laura dijo...

Que hermosos seria poder tocar el alma de algunos seres...y aprehenderla...y no soltarla.

Tienes un sentir exicito.

Saludos

Lety Ricardez dijo...

Querida Olie:

Me encanta lo que dices acerca del alma, de sus cicatrices, de sus recuerdos y vidas aprendiendo. Quisiera creer en la reencarnación como creo en formar parte del SER.
Me gustaría una oportunidad para reivindicarme para corregir, para aprender más.
Pero sea lo uno o lo otro, lo aceptaré poniendo mi grano de arena para vivir la espera conforme a mi conciencia (tratando que mi inconciente camine de la mano con ella)
Te quiero entrañablemente amiga.

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Don Fernando:
La imagen de la ternura y de la caballerosidad para mi es usted.
Lo Beso respetuosamente en la frente.

Lety Ricardez dijo...

Querido Ipnauj:

¿En verdad todavía no te he mostrado mi alma. O tal vez no la has querido ver?

Eres una persona especial y en verdad me gustaría darme a conocer contigo. Siempre he creido que mis palabras son agua, así de transparentes, pero tal vez eso es sólo una pretención mía.

Por favor sigue viniendo, así, algún día me verás.

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Dices bien querida Laura:

Sería hermoso poder aprehender el alma de algunos seres.
Soy injusta cuando digo "engarfiar los dedos"
como si el deseo de aprehender fuera con garras y no, este desei a veces viene del corazón, pero también sabemos que sólo podemos bañarnos en esa luz para dejarla ir y después reflejarla.

Yo he sentido eso con ustedes varias veces, he bebido en sus aguas y saciado mi sed a lo largo de este año.
Contigo lo he hecho querida amiga. Por eso digo en el primer poema, que el embrujo del bosque no lo forman los trinos de un sólo pájaro.
Yo he participado gracias a ustedes del concierto de vida, ese es el vocinglerío, el canto universal de los pájaros.

Orfa dijo...

Lety, me encanta tu poesía, tu musicalidad. Yo también, como Andreas Kartak, me agarraría con uñas y con dientes. El amor es hiriente.

Lety Ricardez dijo...

Querida Palabras errantes:
¡Cómo me gustaría conocer tu nombre real! No sabía de tu operación y mira, yo también pasé por esa experiencia en Mayo del año que recien termina. Mi pronóstico era muy malo y las posibilidades que de volviera del quirófano escasas. Pero nosotros no podemos anticipar los caminos. Fue con ese motivo que empecé a escribir el otro blog, el de porque yo asi lo quise y ahora aquí estamos ambas, con tantos amigos nuevos y agradecidas por todo lo que recibimos. Las dos tenemos amigos de Luz.
Me gusta tu blog y voy a ponerte un link en cuanto vuelva a esos menesteres, que me resultan un poco complicados, mientras tanto, te abrazo con cariño

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Orfa queridísima:

De ti y de mi amigo Andreas me dejo comer y tocar con uñas y dientes, porque serían de seda, y sabrían paliar tambien el dolor que provocaran, porque puedo aprender mucho con ustedes. A sacar las palabras de su contexto como dice Andreas en una lección que me tiene prometida.
Besos para tí amiga cercana.

XXX dijo...

A mí se me ocurren varias cosas cuando se habla de alma. Lo primero es esa definición tan general sobre su inexistencia. Eso no es original, pero está ahí.

Lo segundo que se me ocurre es un par de alitas de mariposas. Me refiero a ese polvillo que subyace en la alas, y que protege la movilidad de ellas. Si las tocas, el polvo se pega en los dedos y la mariposa pierde el vuelo óptimo, o tal vez se quede inválida, y en ese caso es mejor verla revolotear y no meterse a estropearlo todo.

Silencio dijo...

Yo agarraría solo por el hasta no ver no creer.

Salud !!!

Lety Ricardez dijo...

Querido Perplejo, tomo nota de tu comentario, que me gusta mucho, y voy a subir para tí un poema de mariposas inválidas, que lo tengo, y otro acerca del polvo de sus alas, para que veas la coincidencia de nuestro pensamiento.
Es hermoso ver como los pensamientos se hilan con los de otras personas en determinados momentos.
Te abrazo con afecto

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A que don Silencio, tú como Santo Tomás, pero ¿no te sucede? que en algunos casos, al escribir sientes que te has descarnado? Estoy segura de que si, porque te leo.
Te dejo mi abrazo y todo mi cariño amigo mío.

Patricia Ma. Barraza dijo...

entonces por favor llore hasta que se seque... me encantan sus ojos mojados... saludos desde tijuana...

Lety Ricardez dijo...

Buenas tardes Iduard:
Gracias. Decirlo simple y llanamente, expresa mi contento ante su presencia en este espacio.
No le había encontrado antes y me sé afortunada de que usted me encontrara.
Irrumpí con el permiso tácito que hoy me concedió en el espacio de su Isla y he vuelto con la mente plena.

Lety Ricardez dijo...

Hola Patricia, bienvenida seas.
Ya estuve en tu espacio para conocerte y regreso complacida. Que lo jóvenes gusten de mi, es un regalo maravilloso que no deja de sorprenderme cuando me llega.
Espero y deseo, que nuestras mutuas visitas se repitan. Gracias por tus generosas palabras.

Lety Ricardez dijo...

Ay Iduard, mil gracias, en realidad temí ser demasiado simple para su enfoque. Mis palabras suelen ser agua.
Claro que si de nosotros depende, volveremos a encontrarnos. Será un verdadero placer

Tristán dijo...

Los dedos, los dedos como garfios, que a veces se nos pone necia el alma.

Lety Ricardez dijo...

Don Tristán, si tú supieras el alboroto que se arma en mí cuando me visitas aquí, muy distinto del trato nuestro de cada día.
El único renuevo de mi árbol que me permite mirarme a través de sus ojos, que me riega, aunque sea así con gotero.

Que el año te sonría y logres tus afanes es mi más profundo deseo.

Gala dijo...

Bonito rincón para perderse... Me ha gustado mucho este poema: Toda la vida queriendo tocar lo intangible y cuando se me brinda la oportunidad, huyo asustada. Llena de contradicciones, así soy yo...

Nos volveremos a encontrar!

Lety Ricardez dijo...

Creo que a todos nos impone el misterio de lo intangible Ojhala.

Es un placer tenerte aquí y mayor será si nos volvemos a encontrar. Yo iré a conocer tu espacio, gracias por abrirme la puerta.

princess olie dijo...

Mi amiga:
Voy a contarte la siguiente historia real:
Pablito tenía dos años. Apenas se encumbraba en la ventana abierta del lenguaje cuando preguntó, mirándose al espejo: "¿mamá, por qué cuando YO ERA GRANDE, ERA RUBIO y ahora no?". Me paralogizó y contesté lo primero que se me vino a la cabeza: "porque ahora eres pequeño, Pablito".
Estaba estupefacta, pero él no soltaba el tema: "yo era alto y me ponía botas"...
Con este detalle me estremecí. Siempre he soñado con los campos de concentración de los nazis y son tantos los detalles que podría afirmar que antes de soñarlos, los viví.
Por eso estoy convencida que la Vida Eterna es una sucesiva y complicada red de encarnaciones para que aprendamos y, al final, lleguemos donde está Dios.
Un abrazo:
Olie

Lety Ricardez dijo...

Gracias por la historia Olie:
Debo decirte que mi hijo Ricardo, de niño, cuando salía con mi papá hacia su trabajo, que era en un pueblo distante algunos kilómetros de Oaxaca, le decía a su abuelo: Abuelito, abuelito, ves allá aquellos que parecen hoyos en las rocas, no son eso, son cuevas y cuando yo era grande vivíamos allá. Esto lo repetía con lujo de detalles, por eso su abuelo le llamaba "alma vieja" Yo no se que pensar al respecto, pero trato de vivir esta vida como la única, sobre estos estos mis nuevos días, porque los primeros años,mi consciencia no era la misma.
Menos mal que va hacia arriba y no hacia abajo.
Besos otra vez amiga